jueves, 6 de marzo de 2008

El mexican way of life

Fresas, Arribistas, Clasemedieros, Satelucos, Asalariados, todos en trolebús, microbus, pesero, auto compacto que aún debemos, auto sedan que aún debemos, autos de lujo de hace 10 años, casa rentada, propia o prestada, comiendo tortillas frijoles y vino tinto, vistiendo pirata o de marca. Todos, todos vivimos de algún modo el Mexican way of life.

Estamos viviendo una brecha generacional la cual nunca conoció el terremoto del 85, el peso sin tres ceros, las racias en la Ciudad de México, la violencia desmedida en las vocaciones, el origen del SIDA. Esa generación es la que más influencia recibe de los programas de televisión sobre cómo debe ser la vida.

Si eres hombre, aún siendo joven, debes tener o aspirar a tener, un trabajo aunque sea mal pagado pues con algo debes pagar la comida a la novia o a los suegros, debes tener buena ropa para ocultar tus demás defectos y finalmente debes tener muchos amigos aunque estos no sean verdaderos amigos. Debes tomar y tratar de ligar a cuanta chavita veas para que experimentes el sexo cuantas veces te sea posible.
Si eres mujer, debes tener crisis de indentidad constantes y no debes saber que hacer con tu vida para cometer locuras para luego arrepentirte, si, como en las telenovelas pues nunca faltara el niño lindo que le gustará recojer a cuanta desvalida se encuentre. Debes ser frívola y no preocuparte por nada que no sea tu entorno inmediato. Todos estan para servirte.

Nuestro Mexican way of life no es más que una falsa percepción de satisfacción con la vida y con las condiciones sociales que tratan, solo tratan, de parecerse a una realidad mucho más lejana de nosotros como la sociedad gringa.
Muchos chavos han perdido el clásico cinismo mexicano para convertirse un manojo de emociones reflejadas por peliculas, telenovelas, revistas y demás modelos. Ya no hay resginación ante la tragedia, el "ya ni modo" se convirtió en "hagamos algo amigos!" todo por ser portagonistas de historias desabridas.
Esos que finalmente votan por el PAN por que ahora es cuestión de estilo.

continua.

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